cuenta explotacion restaurante

El beneficio de explotación o ebitda

El resultado de explotación viene determinado por la suma de los presupuestos relacionados anteriormente.

Así como hemos anunciado en la introducción de este capítulo, y teniendo en cuenta que cada negocio es distinto, una estructura razonable del presupuesto de la cuenta de explotación es el siguiente:

+ 100% Ingresos
– 30% Materias primas
– 33% Personal
– 5% Alquiler
– 17% Gastos generales
= 15% Resultado de operaciones (ebitda)

 

Así, ahora estamos en condiciones de poder hacer el cálculo de nuestro resultado operativo (o de explotación).

Este resultado se conoce también como ebitda (Earning Before Interests, Taxes, Depreciations and Amortizations, o ganancias antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones).

De nuevo queremos remarcar que no debemos confundir este dato con el importe exacto de lo que tenemos en la caja del restaurante o del banco, ya que hay muchos factores que no están incluidos: cuentas por cobrar, proveedores por pagar, etc.

Es el dato que muestra el resultado bruto de la explotación del restaurante y que nos indica lo bien o lo mal que lo estamos gestionando.
Este será el importe que más nos va a ayudar a validar la salud de nuestro negocio y, sobretodo, nos dará información de si estamos haciendo las cosas bien o no a nivel de explotación.

Este beneficio ordinario de explotación deberá ser suficiente para hacer frente a las obligaciones derivadas de las devoluciones de capital y el pago de intereses de la inversión realizada.

 

La cuenta de pérdidas y ganancias y el impuesto sobre sociedades

En primer lugar, debemos tener en cuenta que la fórmula jurídica en la que nos hayamos constituido condiciona la manera en la que vamos a liquidar nuestros impuestos.

Es importante destacar las diferencias existentes entre las distintas formas de constitución de la empresa o tu alta como autónomo (mediante módulos, estimación directa…). Te recomendamos que hables con tu asesor fiscal para detallar la información:

  • AUTÓNOMO
    • Por módulos
    • Estimación directa
  • SOCIEDAD LIMITADA

En cualquier caso, para hacer una previsión del impuesto que vamos a pagar debemos, en primer lugar, establecer la base del impuesto.

Para establecer la base del impuesto y completando la cuenta de explotación con los conceptos que vamos a presentar a continuación, obtendremos la denominada cuenta de pérdidas y ganancias o cuenta de resultados de la empresa, documento oficial que se debe presentar a Hacienda.

Además de reflejar los ingresos, los gastos y el resultado de operaciones o ebitda de la sociedad, la cuenta de pérdidas y ganancias presenta:

  • el resultado de operaciones (ebitda)
  • la dotación de amortizaciones
  • el resultado neto de la explotación o resultado antes de intereses e impuestos
  • el resultado neto financiero
  • el total de las actividades extraordinarias
  • el resultado antes de impuestos
  • el impuesto
  • el resultado después de impuestos

La dotación de amortizaciones

Desde el punto de vista contable, entendemos por amortización la representación contable de la pérdida de valor o depreciación que experimenta un activo de forma irreversible.

Eso significa que la inversión en elementos de activo que pueden durar más de un año debe reflejarse como gasto de forma proporcional a los años que se supone que va a durar o va a ser útil.

Por ejemplo: un ordenador tiene una vida útil supuesta de 5 años. Por lo tanto, si compramos hoy un ordenador por 1.000,00 €, deberemos activarlo en el inmovilizado de la empresa como activo y dotar la depreciación del mismo o amortizarlo en 5 años, que supone poder pasar como gasto 200,00 € al año.

Entonces, veremos que:

  1. El año de la compra destinamos 1.000,00 €, de los cuales solo podemos pasar como gastos una parte, creando un déficit entre resultado y caja disponible.
  2. A su vez, en los años sucesivos vamos pasando la parte proporcional del gasto (200,00 €) sin que eso signifique una salida de caja real, y así recuperamos el déficit creado en el año de compra.

 

Como norma general aplicaremos las tablas elaboradas por el Ministerio de Hacienda, que determinan los coeficientes máximos (expresados en porcentaje anual a aplicar al precio de compra) y los valores mínimos de amortización (expresados en años máximos de vida útil de los respectivos bienes), en función del tipo de bienes.

Con el resumen de la dotación de cada uno de los elementos que configuran nuestro activo material según el periodo del que se trate, obtendremos la cifra total a asignar a dicha dotación.

Una manera eficiente de calcular el importe a dotar año tras año es elaborar una previsión de gastos de amortización en base a:

  • El importe de inversión de cada tipo de activo
  • La duración de amortización de cada tipo de activo
  • El porcentaje de amortización de cada activo

En el siguiente post seguiremos con más puntos relacionados con la cuenta de explotación.